El más veterano en el Atleti es Antonio López que lleva la friolera de ¡seis temporadas! en el primer equipo, eso sí, no consecutivas. Le siguen Leo Franco, Pablo y Perea con cuatro; el resto son meros advenedizos. Ni la gente de casa aguanta en la ribera del Manzanares, véase Torres, Arizmendi, Gabi, Manu del Moral... aquí no se queda ni la potis.
Piensen en cuánto les queda de vida a los fichajes de hace dos temporadas: Mista, Pernía, Jurado, Eller, Ze Castro o Seitaridis. ¿Alguien apuesta a que no se jubilan en el club? Aunque el que parece que va abandonarnos de inmediato es Maniche, ahora que en los foros se hablaba de él como insustituible, ¡caray!, pues ahora dicen que tiene un pie fuera, que es un rebelde y que fingió una lesión para no jugar en Motril, y que es un borracho y un fiestero y que no está comprometido. Aquí, que no somos de medias tintas, ya lo tenemos claro –¡a la puta calle! por fiestero, borracho, putero y por “cara pan”.
Mi pregunta es ¿qué tiene este club que nadie quiere quedarse y a los pocos que quieren se les pone en la ‘rue’ a la mínima? Yo ya no recuerdo quién fue el último jugador en jubilarse en el Atleti después de una entera vida deportiva ligada al club pero debió ser Toni, López o Solozábal, supongo.
Sin ir muy atrás, sigo sin saber porqué marcharon esta temporada Gabi y Luccin al Zaragoza o Petrov a la premier. Porqué se fue Gronkjaer, o Kezman, o Pínola. Jugadores por los que se llegó a pagar sumas importantes y salieron a primeras de cambio o jugadores que no eran peores que los que vinieron a sustituirlos.
Aunque, aún me cuesta más saber porqué vinieron jugadores como Javi Moreno, José Mari, Mussampa, Nano, Nikolaidis, Álvaro Novo, Rodrigo Fabri, Pato Sosa, Velasco, Pernía, Eller, Cleber Santana, etc.
El caso es que este baile de jugadores pocas veces deja beneficios, casi nunca se cubren los gastos y la mayoría de las veces lo que se obtiene es un déficit más que notable entre lo que se pagó por el jugador y lo que se ingresó por él al venderlo, si es que se ingresó algo.
Así que intuyo que si “cara pan” Maniche sale del Atleti, ahora, en diciembre será por cuatro duros y costó 12 millones de euros. Como intuyo que tampoco hay sustituto a la vista, un jugador que pueda adaptarse rápido a la liga española y que pueda aportar cosas a un club que aspira a estar arriba. Creo que lo mejor es no vender a Maniche.
No sé si debe estar toda la temporada en la grada o se puede arreglar la situación sin encabronar al vestuario pero si para irse del Atleti a precio de saldo basta con ponerse en rebeldía, no duden que el día que Maxi o Forlán o el Kun o Pablo quieran irse harán lo mismo sabiendo que aquí en el Calderón con eso basta.
Háganme caso, mejor perder 12 millones por Maniche que 15 por Maxi ó 12 por Pablo ó 20 por el Kun. Porque de lo que no tengo dudas es en que todos se irán y juego fuerte a qué será en menos de dos o tres años. ¿Apuestan?