Homenaje “póstumo” a Fernando Torres

Son muchos los que están encantados con la marcha del “niño”, parece que su persona estaba ligada a la mala suerte: con Torres nunca hemos ganado nada, con Torres nunca hemos llegado a ningún lado. Algunos, menos, incluso lo tachan de mercenario; por último, otros, lo acusan de traidor.

En lo que parecen que todos (los anteriores) coinciden es en que sin Torres estamos mejor. –Fíjate como ha mejorado Agüero. –Forlán tiene mucho más gol. –Ahora tenemos un equipo que no juega para él. Etcétera, etcétera.

Bajo mi punto de vista, Torres es lo más grande que le ha pasado al Atleti desde Paolo Futre. Torres ha sido lo único que ha hecho sobrevivir a un equipo que naufragaba en tierra de nadie y que, año tras año, sólo fracasaba y fracasaba. Gracias a Torres la afición tuvo algo en lo que aferrarse y sostenerse. Torres siempre era capaz de hacer un gol imposible, forzar un penalty, levantar un partido, ganar al Barça... sin duda, Torres era el Atlético de Madrid. Y eso, la directiva lo sabía y Torres era intocable, porque sin el efecto narcótico y balsámico de Torres nos hubiéramos levantado contra el palco (ojalá lo hubiéramos hecho) en más de una ocasión reclamando justicia.

Cada verano el sufrimiento se acrecentaba, nuevas y, cada vez, más suculentas ofertas amenazaban con la marcha de nuestro paladín pero nada cambiaba, todo seguía igual. Siempre quedaba Torres. Justo, hasta este verano.

Nuestra directiva nos vendió la marcha del capitán como deseo expreso del delantero. Torres ya no puede vivir sin jugar la champions..., eso sí, nosotros no hemos hecho mal negocio. Claro, en un verano en el que se vende el Calderón y se gasta en fichajes la cifra record de la historia del club, la marcha de Fernando es más fácil de camuflar. Además, el “niño” ayuda, en un último gesto “rojiblanco” marcha sin abrir la boca, sin poner un pero, y perdiendo dinero, de eso casi nadie dice nada. No deja de dar las gracias: “a la afición por el cariño que me ha mostrado en estos diez años. Unos aficionados estarán tristes y otros se alegrarán. Ha sido un placer y un orgullo estar en el Atlético de Madrid. Espero volver algún día y que esta despedida sea un ‘hasta luego’. Creo que he tomado una buena decisión y espero que los nuevos jugadores que vengan consigan lo que no hemos podido nosotros”.

“Ha sido una decisión difícil, pero es un paso adelante en mi carrera porque la oferta era difícil de rechazar. Considero que la operación es buena para todas las partes y pienso que era el momento de dar este paso. El Club está haciendo las cosas muy bien y espero que esto le sirva para crecer. Estoy orgulloso de ser Atlético y esté donde esté seré rojiblanco. La afición me ha mostrado un cariño que nunca imaginé. Me voy con la conciencia tranquila tras haber dado todo por este club. Le deseo mucha suerte al Atlético en esta nueva temporada y estoy seguro de que se clasificará para jugar la UEFA. Apoyaré donde esté como un aficionado más. Ojalá nos enfrentemos dentro de poco en la Champions League”.

“Aquí siempre me sentiré como en casa y mi corazón siempre será rojiblanco. Allá donde vaya siempre seré atlético porque el Club ha sido mi familia”.

“Dejo atrás muchas cosas. Por supuesto, insisto, no me puedo olvidar de una afición que siempre me trató como un ídolo y por ello le doy las gracias. La familia atlética es muy grande y siempre le estaré muy agradecido. Los jugadores se marchan, pero el Club siempre estará ahí. Recomiendo a los jóvenes de la cantera que luchen al máximo para llegar al primer equipo y ojalá el Atlético vuelva a estar luchando con los grandes. Espero que el sueño que yo cumplí lo vean hecho realidad otros futbolistas del Club”.

Si alguien quiere poner un pero a su marcha que lo haga, cada uno pensará y extraerá sus propias conclusiones, yo, personalmente, no puedo dejar de emocionarme al oír (leer) estas palabras. No creo que nadie haya marchado, ni marche, jamás del Atleti con esta clase después de dejarnos todo lo que nos dejó. Ahí van los números:

7 temporadas en el primer equipo (2 de ellas en segunda división); debut en primera división con 18 años; 174 partidos jugados en primera división (casi 35 partidos por temporada); 75 goles (15 por temporada) siempre pichichi del equipo; noveno máximo goleador de la historia del club.

46 partidos internacional absoluto, 15 goles, máximo goleador de la fase de clasificación del mundial de Alemania 2006 y pichichi español del Mundial.

Campeón de Europa con la Selección Española Sub-16. Máximo goleador y mejor jugador del Campeonato.

Campeón de Europa con la Selección Española Sub-19. Máximo goleador y mejor jugador del Campeonato.

Ahí es nada. Desde este humilde blog: GRACIAS FERNANDO TORRES.